¿Qué es una casa pasiva?
Una casa pasiva (passive house o passivehaus) es una vivienda diseñada con un muy alto grado de ingeniería, para garantizar el mayor nivel de confort interior posible con la menor demanda energética y por lo tanto cuidando el medioambiente
Hoy en día, el PassivHaus Institut está en Alemania y establece una serie de exigencias para obtener el reconocimiento de las casas. La más importante de ellas es que el consumo calorífico para calefacción y refrigeración no puede superar los 15kWh/m² al año. (menos de 20€ al mes en consumo para una casa media)
¿Por qué merece la pena invertir en una passivehouse?
- Actualmente el 80% de las viviendas consumen entre 110 y 140 kWh/m² al año de calefacción. Esto es 9 veces más que los 15 que necesita una casa pasiva.
- Una casa pasiva no necesita abrir las ventanas para ventilar el interior: los sistemas de ventilación mecánica se encargan de que sea lo más limpio posible, lo que nos ahorra la pérdida de calor, los olores y los ruidos que entran.
- Los muros y ventanas de la casa pasiva son infranqueables al aire, el agua, las partículas flotantes y todo tipo de contaminación. El interior será el de una auténtica casa saludable.
- El máximo aprovechamiento de la luz solar es una de las bases, por lo que la iluminación natural está garantizada.
- Una casa pasiva crea un auténtico microclima en el interior con consumo casi nulo de calefacción o refrigeración, con una temperatura y humedad constante y estable en cualquiera época del año.
¿Por qué merece la pena invertir en una passivehouse?
Como hemos visto, el objetivo de la casa pasiva es a partes iguales reducir la necesidad de energía y aumentar el confort interior.
- A nivel económico
- Si hablamos de un 10-15% de presupuesto adicional frente a 50 años de durabilidad mínima de la vivienda, con un consumo 9 veces menor de energía todos los años, vemos que la amortización es evidente
- A nivel de confort.
- Se reduce el riesgo de condensaciones, humedades, hongos, corrientes no deseadas, ruido y otros factores que afectan directamente a la salud. Los avanzados sistemas de climatización de la casa filtran de polen, polución y alérgenos el aire interior que se respira
- Por normativa.
- Las directivas europeas publicadas en los últimos años van dirigidas a lograr que todos los edificios del continente sean de aquí a 2050 lo que se conoce como Edificio de Energía Casi Nula, que tendrá unos estándares parecidos a los de las casas pasivas.
Conceptos de una passivehaus:
- Aislamiento
- Un buen aislamiento térmico en la envolvente mejora el comportamiento térmico del edificio especialmente en invierno, cuando la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior es mayor, impidiendo la transmisión de calor hacia el exterior. En verano el espesor y estanqueidad de los muro impide la entrada de radiación solar, obteniendo una temperatura fresca
- Ausencia de puentes térmicos
- son lugares del cerramiento exterior donde el flujo de energía es más grande respecto a la superficie "normal" del cerramiento. Estos puentes térmicos perjudican la eficiencia energética del elemento constructivo y aumentan el riesgo de condensaciones intersticiales y moho superficial. El estándar Passivhaus garantiza la máxima continuidad de la envolvente exterior minimizando los puentes térmicos y garantizando la no formación de condensaciones ni de mohos superficiales.
- Ventanas de altas prestaciones
- El estándar Passivhaus establece una serie de criterios muy rigurosos respecto a las ventanas, debido a que es el elemento constructivo más débil energéticamente de la piel del edificio. Se utilizan ventanas con doble o triple vidrio rellenas de gas noble, dependiendo del clima, combinadas con carpinterías de altas prestaciones térmicas. El vidrio utilizado es un bajo emisivo, para reflejar el calor del interior del edificio en invierno, y mantenerlo en el exterior en verano.
- Hermeticidad
- Puesto que las casas pasivas tienen un aislamiento térmico muy alto, las juntas constructivas deben tener muy pocas pérdidas de infiltración de aire. Las infiltraciones forman parte de las pérdidas energéticas no deseadas que provocan un flujo de aire caliente hacia el exterior en invierno y hacia el interior en verano. Además del aspecto energético, las infiltraciones de aire exterior generan un movimiento de aire húmedo a través de los cerramientos, aumentando el riesgo de condensaciones intersticiales y moho superficial.
- Ventilación controlada (doble flujo, recuperador entálpico o de energía)
- La ventilación mecánica con recuperación de calor consiste en recuperar gran parte de la energía que sale hacia fuera a través de la ventilación cuando renovamos el aire interior de malas características higiénicas, para pre-acondicionar el aire fresco del exterior a la vez que lo filtramos de polen, polución y alérgenos.